Entre el martes 29 de agosto y viernes 1 de septiembre se registraron 17 incendios forestales en Quito. Cuatro fueron los de mayor magnitud y afectaron 147 hectáreas de vegetación, según el Cuerpo de Bomberos de la capital.
En la parroquia de Pifo, al nororiente de la ciudad, las llamas dejaron 69 hectáreas afectadas. Se presume que el fuego inició con la quema de leña para hacer carbón. Le sigue Alchipichí, en Puéllaro, donde se quemaron 52 hectáreas. En Chaupi Molino fueron 13 hectáreas y en el Cañón del Chiche 12.
«Los incendios los empezamos a combatir el día martes a las 13:00 aproximadamente. Hasta el día viernes casi hasta las 21:00 ya pudimos sofocar por completo estos incendios que teníamos dentro de la ciudad», dijo Carlos Moyano, director de Operaciones del Cuerpo de Bomberos Quito.
Reforestar estas zonas donde había arbustos y eucaliptos podría tomar al menos tres años.
«Vamos a tener que estar atentos (en las zonas afectadas) porque como no se quedan con forraje natural, por así decirlo, pueden ser susceptibles de algunos deslizamientos», acotó el alcalde Quito, Pabel Muñoz.
El daño a la fauna es irreversible. Los animales endémicos que no fueron alcanzados por las llamas emigran y no vuelven. Entre ellos puerco espines, conejos, serpientes y aves…
Hasta el momento no se ha podido determinar si la mayoría de los incendios fueron provocados.
FUENTE: ECUAVISA