Un proyecto global de Financiación para la reducción y gestión de agroquímicos, “FARM Ecuador”, con el propósito de promover prácticas agrícolas sostenibles, desarrollar oportunidades de financiamiento y competitividad, así como reducir el uso de agroquímicos peligrosos en beneficio de los ecosistemas y la población, fue presentado por la viceministra del Ambiente, María Cristina Recalde, el ministro de Agricultura y Ganadería, Danilo Palacios, y la representante residente de PNUD Ecuador, Inka Mattila.

La viceministra Recalde abordó “los retos ambientales de cara a la transición ecológica nacional, basados en el desarrollo de la economía sostenible, la gestión de insumos agrícolas y la tecnificación de los pequeños agricultores, que representan el 64% de la producción nacional”.
“Con FARM Ecuador unificamos esfuerzos para enfrentar dos de los mayores desafíos de la actividad agrícola en Ecuador: el uso de plaguicidas peligrosos; y los residuos plásticos. Por ello, trabajamos en procesos de cooperación innovación y acceso a los mercados de consumo para los agricultores”, señaló.
Por otra parte, el ministro de Agricultura, Danilo Palacios, se refirió a la biodiversidad nacional y la necesidad de trabajar en procesos educativos para el manejo responsable de los recursos naturales. “Destacamos el trabajo junto al MAATE y aliados estratégicos para desarrollar la producción sostenible y cosecha rentable”, apuntó.

Como parte de los objetivos a 2028, FARM Ecuador plantea trabajar con 7800 agricultores de Galápagos, El Oro, Manabí y Pichincha mediante el desarrollo de capacitaciones, financiamiento y actividades sostenibles que beneficiarán a más de 60 mil habitantes. Adicionalmente, se proyecta la mitigación de 1000 toneladas métricas de pesticidas tóxicos y 322 toneladas métricas de gases de efecto invernadero (GEI).
Con el lanzamiento de este programa, Ecuador se convierte en un país pionero a escala internacional, promoviendo el fortalecimiento de las actividades agrícolas con responsabilidad ambiental, gracias al acompañamiento de la cooperación internacional y el trabajo incansable de nuestros agricultores locales, base de la soberanía alimentaria y el desarrollo nacional.
FUENTE: MAATE