La implementación de protocolos de bioseguridad en la avicultura es esencial para prevenir pérdidas económicas y proteger la salud de la parvada ya que sin estas medidas, la propagación de enfermedades podría afectar gravemente a la industria.
Esto debe comprender diversas estrategias para reducir riesgos biológicos, como la biocontención y bioprotección, que son críticas para evitar brotes de enfermedades virales, bacterianas y parasitarias en aves.
Para asegurar el bienestar de las granjas avícolas, se deben implementar acciones puntuales como el control de acceso, la desinfección de vehículos, el uso de tapetes sanitarios, el control de fauna nociva y el mantenimiento de depósitos de agua.
Estas medidas deben ser permanentes, no reactivas, para garantizar la efectividad en la prevención de enfermedades y asegurar la sostenibilidad del negocio.
Puntos importantes:
1. La falta de protocolos de bioseguridad genera riesgos económicos importantes.
2. Conceptos claves de bioseguridad incluyen el riesgo biológico, la biocontención y la bioprotección, que limitan la exposición y propagación de patógenos en las granjas.
3. Enfermedades virales como la Influenza Aviar y la Enfermedad de Newcastle, así como bacterianas como la Salmonelosis, representan serios riesgos para las aves y la producción.
4. La desinfección de vehículos y el control de acceso a las granjas minimizan la introducción de agentes infecciosos desde el exterior.
5. La higiene personal, incluyendo duchas al ingresar y salir, y el uso de ropa específica para la granja, evita la contaminación cruzada en las instalaciones.
6. Los tapetes sanitarios en puntos clave de la granja deben estar siempre bien mantenidos y con la dosis correcta de desinfectante para ser efectivos.
7. Controlar la fauna nociva como roedores e insectos es crucial, ya que representan vectores de enfermedades; se requieren trampas y barreras adecuadas.
8. Los depósitos de agua deben mantenerse cubiertos y limpiarse regularmente, ya que son una fuente potencial de crecimiento de microorganismos patógenos.
9. Cada cambio de parvada debe incluir una limpieza profunda para eliminar residuos que puedan albergar patógenos de ciclos anteriores.
10. La bioseguridad debe ser una práctica continua y responsabilidad de todos en la granja, no una medida temporal, para garantizar la salud.
FUENTE: AVICULTURA MX